Filtro ducha

Descripción

Contienen carbón activo de diversas calidades. Al eliminar el cloro del agua, se consiguen básicamente dos objetivos:

1. De una parte nuestra piel está más cuidada puesto que el cloro, como oxidante es un irritante para la piel. Esto cobra mayor relevancia si cabe en la piel de los niños, personas mayores, pieles sensibles y especialmente en ciertas afecciones de la piel como ciertos eccemas, pruritos, etc.

2. Por otra parte, en las duchas se produce un fenómeno de aspersión y micronización por la propia alcachofa o «teléfono» de las mismas, lo que lleva a inhalar el gas cloro que no es nada adecuado a nuestro sistema respiratorio. Con un filtro de ducha, evitamos tanto agresiones a nuestra piel como a nuestros pulmones.

En nuestro caso, los filtros de ducha son fácilmente instalables por cualquier usuario, pues poseen dos roscas de la misma medida que la conexión del cable del «teléfono», pudiéndose intercalar tanto en su inicio cerca de la grifería como en lo alto, antes del propio teléfono según su conveniencia. Todos ellos están constituidos de carbón vegetal activado con KDF que inhibe el posible crecimiento bacteriano. El tiempo de uso es variable en función de la calidad y cantidad de agua que depuren, pero siendo conservadores recomendamos cambiar el cartucho interior cada 6 meses aproximadamente.

¡Use menos cremas hidratantes y sienta su piel sana!